Vistas de página en total

martes, 4 de enero de 2011

LA CONFESIÓN DE FRITZL SACUDE AUSTRIA


La noticia ocupa en la edición del día 29 de abril la portada, mostrándonos la imagen más conocida de Josef Fritzl: el anciano de 74 años, poseedor de una mirada penetrante y desprovista de cualquier atisbo de culpabilidad. 

(Fuente: Google Imágenes)
(Fuente: Google Imágenes)
Franz Polzer, jefe de la Policía de la Baja Austria
(Fuente: Google Imágenes)


Fritzl observa a la cámara desde una distancia emocional espeluznante, con aparente desdén, acentuado por el arqueo de sus delicadas cejas, por unos labios tensos, prácticamente inexistentes, barridos por el bigote entrecano el que no es complicado percibir cierto descuido -imperativo del confinamiento nocturno en la celda de la comisaría de Amstetten. No podemos separar esta contundente portada (a través de la cual la historia comienza a ganar peso, a estar en boca de la opinión pública) de la noticia que encabeza la sección de INTERNACIONAL en la página 32 del mismo ejemplar: 


(Fuente: Bing Imágenes)

Aquí
el texto quizá provoque menos la atención que las imágenes que lo acompañan. La exposición gráfica es efectuada en diversos niveles: desde un mapa para situar Amstetten en la geografía del país alpino, una fotografía aréa tomada de la residencia de los Fritzl y otra su fachada. Un esquema describe las diversas estancias del zulo en el que Elisabeth Fritzl fue encerrada, y que, recordemos, estaba constituido por cinco habitáculos distribuidos en una superficie de 60 metros cuadrados sin presencia de luz natural y con techos a una altura de 1,70 centímetros. También se adjuntan las instantáneas del sótano que ilustran el tortuoso escenario del cautiverio

Se introducen datos acerca de la coartada de Fritzl acerca de la desaparición de su hija Elisabeth, que en el momento en el que fue destapado el caso de incesto contaba con 42 años. Se aportan detalles de cómo su cautiverio fue descubierto por las autoridades de la población austriaca.





(Fuente: Google Imágenes)

Elisabeth Fritzl, a los 15 años (Fuente: Bing Imágenes)
La noticia es cerrada por ABC en la página 34, con el siguiente titular: “LA PREFERIDA DE SU PADRE”, aclarando que "Tras conocerse el caso de incesto y encierro en Amstetten, muchos habitantes de esta pequeña localidad austríaca se mostraron indignados ayer. Pero la sociedad entera se pregunta como ha sido posible algo así sin que nadie lo denunciará". El diario ABC ha fijado su atención en tres facetas de la noticia: ha identificado para el lector, desde la primera plana y con minucioso detalle, el rostro del culpable, que ya es considerado una personificación del Mal; ha analizado los datos  acerca de lo sucedido en Amstetten, reconstruyendo el escenario de la tragedia, y finalmente, ha procurado captar la opinión de los conciudadanos de Fritzl tras ser partícipes de la historia secreta que ha tardado en ser desvelada 24 años, a pocos metros bajo la tierra por la que circulaban cada día.

Otra de las constantes de este caso empieza a ganar peso en las páginas y dos artículos de opinión en La Vanguardia  o en ABC pueden funcionar como ejemplos: 1) la sensación de que es imposible que el propio Fritzl haya llevado en solitario esta tortura, pero también 2) la indignación generalizada de una sociedad acostumbrada a ver nacer a seres humanos despiadados (personas que no tardan en perder los atributos que lo califican como tal y serle adjudicados otros, los que son propios de un monstruo) de su seno y la aterradora certeza de que el mal crece, se desarrolla, pervive en los dobleces de lo cotidiano. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario